domingo, 4 de noviembre de 2012

EL PINO DE SANTI EN SAN MARTÍN DE VALDEIGLESIAS



Un nuevo arbolito más aparece en este blog, en esta ocasión un pino. Los pinos no figuran entre mis árboles favoritos, pero eso no hace que los desprecie. Me gustan más los robles y los tejos, no es otra cosa.
Ha varias especies de pinos en España, esto es lo primero que hay que tener en cuenta. En este caso estamos delante de un Pino Piñonero, (Pinus pinea), que está inmerso a su vez en uno de los pinares más fantásticos que hay en España: el Pinar de Almorox. (Considerando el Pinar como el bosque comprendido entre el Alberche y la localidad de Almorox, por lo que abarca varios términos municipales y está a horcajadas de las provincias de Madrid y Toledo)
Cruzar el pinar por medio de la carretera Nacional Ávila-Toledo nos permite aventar a una masa de árboles,  corpulentos y esbeltos, en un suelo granítico del que sobresalen algunos berruecos. Atravesada por una serie de pistas forestales que nos introducen en esta especie de selva, porque a veces tiene tal aspecto.




Entre estos árboles se encuentra nuestro protagonista, con sus 670 cm de perímetro, y poco menos de 15 metros de altura, ha debido nacer al menos cuando reinaba Felipe II, pues se le calculan unos 450 años. Su nombre se lo debe a su descubridor para el gran público; de niño su padre lo traía aquí para que jugara.





Cuando uno se acerca a él ve claramente la gran herida producida por el desgaje de una rama en la parte oriental del árbol. Por cierto que la rama tendría que tener un grosor semejante al de cualquier pino común.
Caminar bajo su copa, es sentirte un minúsculo ser al que el árbol acoge y abraza. Como cada rama-guía que sale del tronco es de un grosor fuera de lo común, el efecto de estar a los pies del gigante bonachón, es bien palpable.


Lamentablemente el gigante se está tambaleando, porque en los últimos tiempos se ha quebrado en la parte occidental otra rama más, que sin llegar a caer del todo, toca el suelo. Me temo que su salud ya no debe de ser buena.
Para llegar hasta este ejemplar no tenemos más que buscar en www.wikiloc.com una ruta con su nombre. Allí vienen las indicaciones, es muy fácil llegar hasta él.




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